Reality Check para Creativos
Filtro #1 

Reality Check para Creativos

1.A.

La mayoría de las veces estoy en LinkedIn, subiendo casos de éxito o compartiendo insights que sé que pueden interesar a decision makers. También trato de estar en eventos donde realmente se habla de proyectos grandes o colaboraciones, tipo meetups de branding o mesas redondas de marketing.

La verdad, casi siempre estoy en Instagram o en TikTok mostrando lo que hago. También me la paso en Fiverr y Upwork tratando de ganar proyectos, pero siempre es lo mismo: alguien más lo hace más barato o rápido. A veces comparto en grupos de Facebook para ver si alguien necesita algo, pero casi siempre son otros creativos preguntando lo mismo.

Para ser sincero, casi nunca publico lo que hago. Tengo algunos proyectos en Behance y un par de posts en Instagram, pero están ahí un poco abandonados. No estoy haciendo mucho para que la gente me vea.

2.A.

Si alguien me busca en Google o LinkedIn, me encuentra de una. Tengo mi perfil al día, con proyectos recientes y recomendaciones de clientes. Uso el mismo nombre en todas las plataformas, así que es fácil dar conmigo. Además, tengo links actualizados a mi web y hasta un par de videos donde explico mi enfoque.

Tengo mi portafolio en Behance o en Google Drive, pero no está muy ordenado. Son solo imágenes sueltas sin mucho contexto o explicaciones de los proyectos. A veces mando links individuales según lo que me piden, pero no hay un lugar donde puedan ver todo lo que hago de manera clara y coherente.

Tengo perfiles en varias plataformas, pero están desactualizados o mezclados con contenido personal. Si alguien quiere validar lo que hago, probablemente va a encontrar cosas que ya no representan lo que ofrezco actualmente.

3.A.

La mayoría son personas con las que ya trabajé o que saben bien lo que hago. Siempre que alguien pregunta por alguien que haga lo mío, me mencionan de una. En LinkedIn, por ejemplo, apenas alguien dice "¿conocen a alguien que haga XYZ?", ya estoy etiquetado en los comentarios. 

Casi siempre son otros creativos con los que he colaborado alguna vez, pero que están igual que yo buscando proyectos. A veces me mencionan en grupos de freelancers cuando alguien pide recomendaciones, pero casi nunca termina siendo un cliente grande.

No tengo claro quién me recomienda, la verdad. Si alguien habla de mí, nunca me entero o no pasa nada con eso. De vez en cuando algún amigo o conocido menciona lo que hago, pero no es gente que esté conectada con clientes buenos.

4.A.

Cuando hablan de mí, siempre tienen claro lo que hago. Dicen cosas como: "Ella es la que hace XYZ" o "Si necesitas que tu marca tenga más XYZ, escríbele". No tienen que pensarlo dos veces para describirlo.

Depende mucho de quién lo diga. A veces explican bien lo que hago, pero otras veces suena como: "Hace algo de marketing... o diseño... o algo de logos". No siempre queda claro y me toca estar corrigiendo o aclarando cuando me entero.

Ni idea de lo que la gente dice de mí, la verdad. Supongo que mencionan que hago algo relacionado con creatividad, pero nunca me llegan clientes diciendo que alguien específico me recomendó por algo en concreto.

5.A.

La gente suele quedarse con lo que digo. Siempre hay alguien que después me escribe diciendo que le quedó sonando lo que compartí o que le pareció útil lo que dije. También he notado que varios empiezan a seguirme en redes después de alguna charla o intervención, así que sé que algo quedó resonando.

Participo en muchos grupos abiertos o webinars donde la mayoría está igual que yo: tratando de encontrar oportunidades o buscando contactos. Comento o hago preguntas, pero casi nunca alguien se acuerda de mí después o sigue la conversación. Siento que mi aporte se pierde entre el montón.

La verdad, casi no participo en comunidades o eventos. A veces entro a algunos grupos para ver qué están diciendo los demás. No suelo aportar mucho ni hacerme notar.

1.B.

Mi contenido refleja exactamente lo que pienso y cómo trabajo. Comparto proyectos con contexto, explicando por qué tomé ciertas decisiones y mostrando el proceso sin exagerar. Hablo desde mi experiencia real, sin sonar demasiado técnico, pero dejando claro que sé de lo que hablo.

A veces siento que mi contenido se parece mucho al de otros. Veo ideas en redes que suenan bien y las adapto a lo mío, pero a veces termino sintiendo que no reflejan realmente cómo trabajo o lo que pienso. Siento que publico lo que "debería" y no lo que realmente quiero decir.

Publico muy poco contenido o no publico en lo absoluto. Suelo compartir cosas de otros o proyectos que ya terminé, pero sin contar mucho de lo que hay detrás. No me siento cómodo hablando mucho de mi trabajo o mostrando lo que realmente pienso.

2.B.

Tengo clarísimo cuál es el problema que resuelvo y cómo mi trabajo impacta el negocio del cliente. Me conocen porque soy especialista en lograr resultados específicos. Cuando alguien necesita xyz, sabe que yo soy la persona indicada.

En realidad, no me centro en un tipo de cliente o problema específico. Mi trabajo se adapta a lo que la gente necesita: a veces hago diseño, otras estrategias o contenido. No tengo por qué limitarme a un solo tipo de proyecto o cliente si puedo hacer varias cosas según lo que pidan.

No tengo claro a quién debería hablarle específicamente ni qué problema resuelvo como tal. Siento que si me enfoco en algo muy puntual, voy a perder clientes potenciales, así que prefiero mantenerlo abierto.

3.B.

Mi perfil deja claro qué hago y cómo puedo ayudar. No es solo decir que hago diseño o estrategia, sino mostrar cómo eso impacta a quien me contrata. La gente entiende de una qué problema resuelvo y por qué les conviene trabajar conmigo.

Tengo un montón de cosas escritas porque quiero que se vea todo lo que puedo hacer. Hablo de diseño, redes, estrategias... porque no quiero cerrarme a un solo tipo de cliente. La idea es que sepan que puedo ayudar en diferentes cosas según lo que necesiten.

Mi bio tiene el nombre de mi profesión y una frase que suena bonito pero no dice mucho. La dejé así porque me pareció suficiente y no le he cambiado nada desde que la puse.

4.B.

Mi identidad visual está clara en todas partes: uso los mismos colores, tipografía y estilo gráfico en cada red social. Cualquiera que vea algo mío, sabe de una que es mío, porque todo sigue la misma línea y no hay contradicciones visuales entre plataformas.

Tengo un estilo visual, pero no siempre lo aplico igual en todas partes. A veces me emociono probando cosas nuevas y termino mezclando colores o estilos que no conectan entre sí. Entonces, dependiendo de la plataforma, puede que se vea diferente.

No uso mis redes sociales para mi vida profesional.

5.B.

Tengo clarísimo qué me hace diferente y lo muestro en cada proyecto. Por ejemplo, cuando presento un diseño o estrategia, siempre explico el enfoque único que uso o cómo se conecta con el negocio del cliente. La gente que me sigue sabe que mi fuerte es mezclar creatividad con estrategia, y eso siempre lo dejo claro en mi portafolio y en cada caso de estudio que publico.

Siento que mi trabajo está bien hecho, pero no estoy seguro de que alguien lo vea diferente a lo que hacen otros. Normalmente publico proyectos terminados en Behance o Instagram, pero no explico mucho sobre qué los hace únicos o por qué fueron efectivos. Es como si mostrara el resultado sin dejar claro por qué es diferente a lo común.

La verdad, nunca me he puesto a pensar en qué me hace diferente. Subo el trabajo que me parece bueno y ya, sin darle muchas vueltas a si alguien lo percibe como algo único o distinto. No sé si alguien podría notar algo especial al ver lo que hago.

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